¿ Cuál es la Tasa de empleo americana? Los datos del mercado laboral estadounidense y la tasa de empleo americana actual de diciembre no fueron tan buenos como se esperaba. Sin embargo, son bastante contradictorios y no facilitan la situación a los inversores ni a la Fed. En nuestra opinión, no son una razón para abandonar la senda actual de la política monetaria. Los rendimientos de los bonos subieron en respuesta, y las acciones no se movieron mucho. El euro-dólar aumenta ligeramente.
Tasa de empleo actual en EE.UU.
La principal cifra que se sigue es la variación del empleo. Sólo alcanzó 199 mil, mientras que se esperaban 447 mil. Se trata de la segunda cifra baja consecutiva, aunque el dato anterior de noviembre fue revisado al alza hasta 249 mil. Esta cifra no sería alarmante en condiciones económicas normales, pero se esperaba un aumento más rápido si el empleo total sigue estando unos 3,5 millones por debajo de los niveles anteriores a la pandemia.
Pero aquí es donde llegamos al problema que esbozamos el año pasado: La economía nunca vuelve precisamente a la misma posición, y una recesión profunda como la del año pasado provocará un cambio estructural considerable. Por tanto, la cuestión es si la economía ya no se enfrenta a las limitaciones en forma de desajuste entre la oferta y la demanda o el tamaño de la mano de obra que necesita para su rendimiento actual. Esto decidirá la velocidad con la que absorba las vacantes.

Participación de la mano de obra en el mercado laboral estadounidense
Además, los salarios siguen aumentando rápidamente. La tasa interanual cayó al 4,7 pct, pero la de noviembre se revisó al alza hasta el 5,1 pct. Además, los salarios no están creciendo a partir de una base baja: en diciembre pasado sumaron un 5,5%. El crecimiento salarial es un parámetro crucial para la sostenibilidad de la inflación. Las empresas tienen que aumentar su rentabilidad, y probablemente también se vean empujadas a hacerlo por la difícil búsqueda de nuevos empleados adecuados.
Para colmo, además de los datos de las empresas, también tenemos el resultado de una encuesta de hogares, que suena diferente. Según él, en los dos últimos meses aumentó el número de empleados y disminuyó rápidamente el de parados. La tasa de desempleo cayó entonces bruscamente hasta el 3,9%, lo que se ajusta más a las presiones salariales que al débil crecimiento del empleo comunicado por las empresas.
También es posible que una nueva oleada de coronación – omicron – se haya reflejado ya en las cifras de diciembre. El sector de la hostelería, más sensible, mostró unas cifras relativamente débiles. Además, este factor también podría provocar una diferencia en las interpretaciones del desempleo (temporal) y, por tanto, una discrepancia en los datos. Sin embargo, la Fed considera que este factor es rápido.
En cuanto a la interpretación, los datos no son ciertamente tan buenos como se esperaba, pero por otra parte, en nuestra opinión, no indican una disminución de las presiones inflacionistas, lo que es crucial ahora. El bajo desempleo y las presiones salariales apoyan que no se espere la normalización de la política monetaria. Así que la subida de tipos debería llegar en unos meses. Aunque la postura de la Fed es generalmente dovish en su empeño por esperar a que el mercado se recupere completamente, parece que las presiones sobre los precios están apareciendo antes, lo que complica la consecución del objetivo.